domingo, 27 de mayo de 2012

EL GÉLIDO INFIERNO DEL NORTE. LOS 9.999 DEL SOPLAO


El pasado Sábado, nos desplazamos a la localidad de Cabezón de la Sal, para participar en Los 10.000 del Soplao. Un mítica macrha de montaña, considerada una de las pruebas más duras del panorama nacional e incluso de Europa. Las previsiones metereológicas no eran nada halagueñas, y pudimos comprobar que el hombre del tiempo, esta vez llevaba razón. Ese fin dde semana llovería en Cabezón. Aún así, preparamos nuestras máquinas y nos dispusimos a intentar acabar esta dura prueba. El sábado nos dimos un madrugón de altura, para estar en la meta con tiempo suficiente para quitarnos los desagradables atascos que se producen en las primeras zonas del recorrido. Objetivo cumplido. Salimos entre los 200 ó 300 primeros. Ya en el arco de salida una señal anunciaba lo que nos vendría encima: empezaba a llover. Una lluvia fina que nos hizo pensar, ¡bueno si la cosa se queda así, pues bueno!. Salimos y las primeras zonas las hicimos con alegría, sin forzar, por lo que nos vendría más adelante, pero con agilidad. Pero el agua se empeñó en acompañarnos dunrante todo el recorrido, lo que hizo mucho más duros los primeros kms e hizo que algunas zonas fueran impracticables, como por ejemplo "La Cocina". Aún así estábamos disfrutando ¡ seremos masocas !. Así fueron cayendo, San esteban, San Antonio, El Soplao y hasta el MOnte Aa. Seguía lloviendo y nos acercábamos al pueblo de Ruente, donde atravesamos el puente del río de uno e uno. La gente nos animaba como si fuera el Tour de Francia, sólo por eso merecía la pena intentarlo. Nos acercábamos al avituallamiento de Campa ucieda. Llegamos empapados, muchos participantes se daban la vuelta, nos comunicaban que más adelante habían tenido que evacuar a varios participantes medio congelados y además ya no llovía, diluviaba. En ese momento nos concentramos varios de neustro grupo y algunos decidimos abandonar. César y yo, no lo pensamos mucho, ¡no merece la pena, el año que viene volveremos a ver si hay más suerte!. El resto decide continuar con suerte desigual: Nuria y Jaime, que ya iban por delante pudieron acabar bastante bien, Emilio terminó aunque pasó un calvario, pero Tomás tuvo que ser evacuado con hipotermia y al resto los cortaron y los mandaron de vuelta. Con la mirada puesta atrás no me arrepiento de la decisión que tomé, y tengo el corazón puesto en la VII Edición. espero esta vez tener más suerte y tener la fuerza suficiente para aceptar el sufrimiento que los caminos pongan ante mí.
Os recomiendo a todos acudir el año que viene, porque el ambiente es único. Esa gente vive con intensidad la marcha, y se vuelcan todos los pueblos en ella. Impresionante y un 10 para ellos. espero el año que viene estar a la altura de este público tan entregado.
Los datos lo dicen todo, sólo 945, consiguieron acabar por completo:

Aquí podéis ver el grupo de aventureros:

 
 Aquí podéis ver un vídeo de esta edición:



Salu2 y felices pedaladas