El pasado día 20 de Abril me dispuse a afrontar mi segundo reto de la temporada, los 300 kms entre Algete y Ayllón y la vuelta por el mismo camino. Un 300 largo que estaría en torno a los 330 y con un desnivel positivo interesante.
Una foto da fé de la hazaña:
En esta ocasión algunas cosas cambiaron. La priera era la hora de salida, que se adelantaba una hora, siendo las 6:00 la hora elegida, lo que iba a largar las horas de oscuridad de esta Brevet. Un madrugón de aupa. A las 4:00 tocaba el despertador. Xira mi gata me miró con cara de decir, pero a donde vas a estas horas. Por lo visto ya no es mi mujer la única que piensa que estoy un poco loco. Pero la sensación de hacer estas pruebas de larga distancia no se puede contar, hay que vivirlas para entenderlas. En fin, ya había dejado casi todo preparado, pero siempre queda algo por colocar: el bidón, a ver que ropa me pongo, etc. La cosa pintaba mal, viento y frío iban a ser la tónica general de esta dura jornada. En fin me dispongo a llegar a Algete, su polideportivo era el lugar de salida. Aunque voy con tiempo, mi GPS me hace de las suyas y me pierde por el pueblo. Empiezo a ponerme nervioso cuando veo un coche, lo paro (debías pensar que estaba loco porque me bajé del coche y con el disfraz de medio ciclista le empecé a hacer señas con las manos) y amablemente me lleva hasta el polideportivo. Nunca leerá esto, pero le estaré eternamente agradecido. Al final llegó a tiempo y entro para realizar la inscripción. Allí coincido con algunos conocidos de la otra Brevet y comienzan los lamentos: que vaya aire, que vaya frío (2ºC), que esto, que lo otro. Pero ninguno decide no salir. En esta ocasión un nutrido grupo de Randonneurs tomamos la salida. Ahora al coche, sacar la bici, revisar la mecánica, las luces, preparar la mochila (comida, herramientas, ropa,...). La abuela, mi Vitus 979, estaba preparada. Llega la hora y algunos problemas de un compañero con su puente de freno nos hace retrasar un poco la salida. Habrá que esperar hasta las 6:15 para que nuestra marcha comenzara.
En grupo salimos de Algete. En marchas del corte Randonneur, este grupo principal dura poco sobre todo si comienzan las primeras subidas. Y aquí empiezan los primeros tirones, que van menguando el grupo principal, dejando la cabeza en unas 20 unidades. En este grupo principal, llego a Cogolludo. La verdad es que para mantenerme en este grupo en ocasiones tuve que tensar la musculatura un poco más de lo esperado, sobre todo pensando en lo que quedaba por delante. Un refresco es mi primera comida de día, con un bollito de leche preparado para la ocasión. Hago un poco de tiempo, porque conviene medir los descansos y me preparo para salir. Veo que un grupo se está colocando y decido salir con ellos. Segundo error del día. este grupo será a la postre uno de los malos momentos del día. El ritmo empieza poco a poco a intensificarse y además yo no tengo mi día subiendo, por lo que pasado el embalse de Alcorlo, en las primeras rampas duras me quedo cortado. Con un viento de cara de mas de 35 kms por hora, quedarse sólo no fue algo muy bueno. Pero tirando de experiencia, agachando la cabeza, decidí tirar para adelante, guardando fuerzas para el resto del trayecto y confiando en que algún grupo por detrás me alcanzase. La cosa no sucedío ( lo que me hizo pensar que no iba tan mal como creía) y jodido pero contento llego sólo a Atienza. Aquí tenemos el segundo control de la jornada, en un restaurante junto a la gasolinera. Van llegando compañeros. ¡ Ahora !, ¡ tiene coña !.
En fin, unas risas, comentarios de los que nos queda, del reguero que hay por detrás por culpa del viento, la simpatía del camarero que antes de ponerte lo que pides, ya te dice lo que debes, ..... Respiro hondo y como no quiero quedarme muy frío, salgo para continuar. es entonces cuando salen dos compañeros de Bike Works, que había llegado en el grupo detrás de mí, lo que apuntaba un nivel bastante parejo al mío. Les digo que si les apetece, podemos continuar juntos y les parece bien la idea, sobre todo para afrontar las rampas de la Sierra de la Pela. Chino, chano, para adelante. A un ritmo muy bueno, algo penalizado en las subidas por Susana, llegamos a Ayllón. Que tía más dura, en las subidas sufría un montón, pero cuando coronaba, se ponía a tirar con todas sus fuerzas para recuperar lo perdido, en fin lo dicho ¡ más dura que las piedras !. En Aylón nos dimos cuenta de que ibamos muy adelante en el grupo, ya que nos cruzamos con apenas 10 compañeros. ¡ Buena señal !. Decidimos comer de restaurante, cosa no demasiado habitual, pero que siempre se agradece. Ya teníamos la mitad, mas de 160 kms. Ya sólo quedaba plantearse la vuelta, donde el viento, iba a se más favorable, aunque todavía nos encontramos mucho viento de cara. La sierra de la Pela por la otra cara, tampoco es pecata minuta y hubo que apretar, vaya si hubo que apretar. En fin, con más de 200 kms en las piernas llegamos a Atienza, que parecía que no llegaba nunca. Parada y fonda. Había que reponer fuerza. Susana, llevaba penando unos cuantos kms, así que esta parada, la vino muy bien. Mi cambio antes de llegar también había dado señales de fatiga, así que la cosas vino estupenda. Salimos para afrontar los ultimos 105 kms aproximadamente y al poco de salir sufro una avería. ¡ No me lo puedo creer !. ¡ Se me ha salido el núcleo y llevo los piñones sueltos !. Pinta mal, pero armados con una piedra y un destornillador conseguimos dar el apriete justo a la piña, que aguantará hasta termina la jornada. ¡ Quizás , es que le he exigido mucho a mi Vitus !. Pero pensarlo ya no servía de nada, hay que acabar, porque el rescate era complicado, sobre todo a 105 kms de Algete. Un poco inseguro, comenzamos de nuevo y parece que la cosa aguanta. Nos vamos quitando kms y va pasando el día. Según las previsiones, llegaremos de noche entre 10:00 y 10:30, así que había que hacer una parada técnica para poner las bicis al orden para el último tramo nocturno. Fué en Viñuelas, donde tomamos un café para entrar en calor. Volvía a hacer un frío que pelaba y hacía falta algo caliente, para acabar los ultimos 32 kms. ¡ Todavía nos quedaban 32 kms !. Con todo el arsenal lumínico disponible, afrontamos este último tramos para llegar al Polideportivo de Algete sobre las 10:25 de la noche. Objetivo cumplido y ¡ otras 300 kms a la saca !.
Las cifras:
329 kms
3869 mts de desnivel acumulado
Total: 16 horas 29 minutos
Tiempo parados: 2 horas 30 minutos
Tiempo en movimiento: 14 horas
Velocidad Media: 23,5 km/h
¡ AHORA , A POR LA 300 KMS DE YEPES, EL DIA 18 DE MAYO !